El pasado 17 de enero del año 2019, 22 jóvenes que que tenían la ilusión de ser los mejores policias de Colombia, fueron víctimas de un atentado que segó sus vidas y el sueño de sus familiares, muchos de ellos les contaron a sus familias lo feliz que estaban y lo seguro que se sentían en ese lugar, sin embargo, la violencia del país que los vio crecer en sus regiones, los cogio de sorpresa en la capital.

A todos sus familiares nuestro más sentido mensaje de condolencias y decirles que aún nos afecta la partida qué además de ser policía, eran hermanos, hijos y los mejores seres humanos.