Las familias indígenas expresaron su gratitud por el noble gesto de los uniformados.

Con mucha alegría, sonrisas y expresiones de gratitud, recibieron los habitantes de la comunidad indígena del “kilómetro 18” el parque infantil que los uniformados de la Policía Nacional adscritos a la Policía de Prevención y Educación Ciudadana, construyeron y entregaron al servicio de los niños y niñas de las etnias indígenas Ticuna y Cocama.

Durante dos meses y sin descanso, la junta de acción comunal de este sector rural y los patrulleros de policía, unieron sus esfuerzos a los moradores, gestionando madera, recursos, pinturas tornillos, el diseño, los planos y por último la construcción de éste escenario para la sana diversión y recreación de los niños y niñas indígenas, que antes jugaban en un potrero con pelotas de trapo y unos improvisados “arcos de futbol”