Crónicas 24 Escatológico Parque Santander
A petición de varios contactos, y en vista que a la fecha de hoy muchas de estas crónicas leticianas escritas hace varios años cobran vigencia pues muchos de los hechos allí denunciados siguen vigentes sin que ningún gobernante tome cartas en el asunto y las cuales, para su época, fueron publicadas en un periódico local llamado Evaluación y Gestión que se editaba bajo la gerencia del periodista Mauricio Zoza que muchos habitantes no tuvieron la oportunidad de leer.
Por esta razón empiezo a publicarlas de nuevo aleatoriamente para que se den cuenta que las cosas son muy poco lo que han cambiado y por el contrario cada día empeoran más.
Crónicas leticianas 24
El escatológico Parque Santander
Continuando con las crónicas y en especial con éstas últimas que he escrito, en donde estoy dejando plasmada ciertas situaciones que están sucediendo y que de una u otra manera afectan la buena imagen de la ciudad con su repercusión en el turismo que los visita, va otra de mis denuncias.
Ya estuvimos hablando de las obras conclusas e inconclusas que han pasado o están pasando a la historia por las construcciones corruptas de sus contratistas, por la negligencia de los mandatarios y sobre todo por la falta de dolientes que por lo menos denuncien estos elefantes blancos.
Hoy hablaremos del escatológico parque Santander.
Es conocido por todos el espectáculo singular y único, además atractivo turístico que ofrecen todas las tardes los loritos que desde lejanas tierras vienen en bandadas a buscar refugio y dormida en los árboles del citado parque.
También es bien sabido que este espectáculo data desde hace muchos años sin que se presentara ese fenómeno de olor penetrante a excremento que se está viviendo últimamente y que puede ser normal para los que ya se están acostumbrando a dicho olor, pero que para un turista así sea el espectáculo mas hermoso y atractivo, la compañía de ese efluvio amoniacal penetrable, desdice mucho de la novedad.
Y creo poder dar una explicación del fenómeno aunque no muy científico si puede ser lógico.
Antiguamente llegaban como están llegando hoy en día y en mayor cantidad, los loritos a buscar su dormida. Por consiguiente sus residuos digestivos siempre han caído al suelo del parque que en aquella época estaba cubierto por hierba o grama como quieran llamarla y no era poco el excremento que caía a tierra proporcionalmente a la cantidad de animalitos que llegaban y hagamos una la cuenta para tener una idea de la situación.
Suponiendo que cada animalito defeque un gramo de excremento que multiplicado por, y seamos flexibles, diez mil pericos que llegan a diario, serían diez mil gramos los cuales divididos por quinientos gramos que tiene una libra serían 20 libras diarias de excremento, oígase bien veinte libras de excremento los cuales como dije antes caían a la hierba en donde la naturaleza con su sabio poder la reciclaba y con la ayuda de uno que otro aguacero la tierra absorbía este abono. Y que yo sepa nadie estaba molesto porque allí no había mal olor, pero que sucede hoy, y es inaudito que en esa selva no haya poder humano que siembre zona verde en el parque para que suceda el mismo fenómeno que ocurría antiguamente, pues hoy en día, el excremento esta cayendo en zonas áridas y encementadas del parque en donde con un calor de 34 grados su fermentación es mas notable y a esto agreguémosle otra situación más: antes los únicos visitantes del parque eran los pericos los cuales se alimentan de frutas razón por la cual su excremento no es tan oloroso pero ahora tenemos otros visitantes que también les hacen compañía y son las golondrinas y estas si son insectívoras de las cuales no se si la descomposición de su excremento sea de un olor mas característico que al combinarse con el de los pericos, produzcan esa fermentación.
En todo caso lo que quiero resaltar es de que la ciudad turísticamente con estas situaciones, no esta saliendo bien librada y lo digo por el turismo que llega por su cuenta ,el que si camina por la ciudad y se unta de pueblo dándose cuenta de estas anomalías las cuales comentan posteriormente haciendo una mala propaganda la cual va en detrimento de la ciudad, cosa que talvez no aprecian los turistas que llegan bajo el dominio de los pulpos turísticos que manejan parte de esta parafernalia los cuales ya tienen programadas y definidas sus rutas y a los cuales no les muestran la realidad de la ciudad cosa que hace falta como medio de presión para que las autoridades se apersonen de estas fallas las cuales acompañadas con el deterioro de calles y avenidas, la contaminación sonora, la polución y las basuras esparcidas por ciertos sectores, vuelvo y repito no le dan buena imagen a la ciudad.
Para tener conocimiento de esto, las autoridades deben untarse de pueblo, salir de vez en cuando de sus palacetes para que observen esta triste realidad, cosa que les queda muy difícil hacer pues como en campaña prometen tantas cosas que no pueden cumplir porque están pagando los favores y compromisos adquiridos con los patrones patrocinadores, les da miedo compartir con el pueblo que los eligió y a los cuales les están incumpliendo y si acaso se dan cuenta, estas minucias no les interesa arreglar.
Imposible que en esta época no exista “un componente” que contrarreste el olor a que me refiero para que los turistas puedan ver el espectáculo con garantía, pero creo que como esa inversión no produce dividendos para satisfacer el bolsillo de los contratantes creo que esta situación la seguiremos viendo y oliendo por mucho tiempo.
En algún escrito comenté de la mentalidad “micro” de muchos empresarios y gobernantes para construir obras modernas que le den un aspecto diferente a la ciudad y no el de pueblo que viene presentando desde hace muchos años pues no existen obras representativas de gran envergadura que pasen a la historia por su proyección turística futurista.
Todas estas denuncias las hago porque durante el tiempo en que permanecí en la ciudad pude compartir, inquietudes, quejas, desilusiones de muchos turistas que nos visitaron. Como última perla les comento una anécdota de unos turistas que llegaron a mi negocio de los cuales escuche algunos de los pecados turísticos por los cuales esta fallando la ciudad.
Pues bien, como dije anteriormente eran de esos turistas que viajan por su cuenta , los que les gusta conocer a fondo la problemática de los pueblos y ciudades que visitan, y de los cuales ya sabia que venían de visitar el “serpentario”.Al preguntarles como les había ido, sin pelos en la lengua me contestaron escuetamente: vea paisano, cual serpentario, eso para nosotros es un lombrisario, como es posible que en plena selva Amazónica lo lleven a uno a ver unas lombrices… venimos de ver serpientes mas grandes y llamativas, que falta de visión turística.
Así que ese espectáculo aéreo realizado por los pericos y golondrinas, saturado con olor a formol, la fuente del parque la que en otrora fue una hermosa obra, el puente colgante deteriorado con su lago lleno de basura, los escombros del juego infantil el manatí, la famosa carpa y local elefante blanco que nunca prestaron ningún servicio creo, que no son las obras mas representativas para mostrar al turista y sobre todo por su ubicación al quedar en el centro de la ciudad y para mas tristeza cerca de los adefesios de construcciones llamados Gobernación y Alcaldía del departamento.
Y ahora que no vengan a decirme que no tengo la razón… y lo que más asusta es que nadie dice nada…Que indolencia tan absurda.