BRASIL
La operación se desarrolló gracias al trabajo investigativo del Centro de Fusión de Información de la Amazonía.

En una operación multinacional entre la Armada de Colombia y la Policía Federal de Brasil, con información suministrada por el Centro de Fusión de Información de la Amazonía, fue interceptada una lancha que transportaba más de dos toneladas de estupefacientes sobre el Lago Catalão, municipio de Iranduba, estado de Amazonas - Brasil.

Durante la verificación a la embarcación, se hallaron en su interior 988 kilogramos de marihuana tipo Creepy y 1.120 kilogramos de clorhidrato de cocaína.

Se presume que los estupefacientes incautados, procederían de la triple frontera entre Colombia, Brasil y Perú y habrían sido transportados a través de diversas rutas fluviales hasta el lugar de la interdicción. Este alijo tendría como destino la ciudad de Manaos - Brasil, desde donde se realizaría la distribución de los alcaloides.

El material fue puesto a disposición del Departamento de Aprehensión de Estupefacientes de la Policía Federal en Manaos, para los procedimientos judiciales correspondientes.

La Armada de Colombia a través de la Fuerza Naval de la Amazonía, continuará poniendo a disposición todas sus capacidades para contrarrestar el actuar de las organizaciones transnacionales dedicadas al narcotráfico, impactando sus fuentes de ingresos en pro del desarrollo económico y social de las comunidades en la región.

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Fuente
Oficina de Prensa
Comando Armada de Colombia

¿Qué logró Visión Amazonía en su primera fase?: los hitos de REM I

Entre 2016 y 2023, Colombia ha sido testigo de la implementación del programa REM I Visión Amazonía. Su norte: promover un modelo de uso sostenible del territorio amazónico.

Durante estos siete años, Visión Amazonía ha llegado al 70 % del territorio indígena en el país, ha impactado positivamente a 12.465 familias campesinas y ha conseguido acuerdos de conservación que cubren 318.644 hectáreas amazónicas.

Desde la implementación de REM I, la tasa de deforestación en Colombia ha venido reduciéndose. En 2023, se alcanzó la cifra más baja en 20 años.
Agosto de 2024. En 2017, la deforestación en la Amazonía colombiana llegó a la cifra más alta en dos décadas. En aquel año, mientras se deforestaban unas 144.0000 hectáreas de bosque, calentaba motores REM I, un programa del gobierno colombiano vinculado al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible que, con el apoyo financiero del Reino Unido, Alemania y Noruega, llegó al país con el propósito de impulsar estrategias de conservación del bioma amazónico y el uso sostenible de sus recursos naturales.

Para 2023, seis años después desde la implementación de REM I, la deforestación llegó a mínimos no vistos desde 2001, con 44.000 hectáreas. Actualmente, la deforestación es un 70% menor frente a aquel funesto 2017.

De acuerdo con las estimaciones de Visión Amazonía, de continuar con este ritmo, el país podría alcanzar una deforestación neta de cero en el bosque amazónico para 2030.

¿Qué ha pasado en estos siete años? El programa REM Visión Amazonía desde 2016 presenta los resultados de su primera fase.

Siete años de REM I

El programa REM I ejecutado por Visión Amazonía se desarrolla en cinco pilares que promueven un modelo de sostenible del territorio amazónico.

Estos pilares trabajan de manera coordinada ejecutando acciones que impulsan el aprovechamiento sostenible del bosque, formula planes de ordenamiento y manejo ambiental y forestal, promueve acuerdos con entes territoriales, asociaciones de campesinos y comunidades indígenas para reducir la deforestación en la Amazonía.

Gobernanza forestal
Planificación y Desarrollo Sectorial Sostenible
Desarrollo Agroambiental
Oportunidades
Territorio y Ambiente
Con estos cinco pilares como norte, el programa REM I desarrolla acciones como la recuperación de áreas degradadas y deforestadas, la implementación de sistemas agroforestales y pone en marcha iniciativas de manejo forestal sostenible.

En siete años, REM I ha buscado apoyar decididamente aquellos proyectos productivos con el potencial de transformar las realidades de las familias indígenas en el territorio. Las mismas comunidades implementan esas iniciativas desde su ancestralidad, con el apoyo de Visión Amazonía en equipos, acompañamiento financiero o fortalecimiento de la institucionalidad presente.

Para ello, abrió cuatro convocatorias que contaron con 139 proyectos que terminaron impactando positivamente en el 70 % de los territorios indígenas.

Se estructuró el Incentivo Forestal Amazónico (IFA), un esquema de pago por servicios ambientales que impactó positivamente a 2.571 familias. Durante tres años, estas familias se comprometieron a conservar 124.856 hectáreas de bosque.

Además, en el marco de REM I se diseñaron instrumentos financieros verdes como los ‘Créditos verdes’ con el Banco Agrario. Desde lo educativo, el programa desarrollado numerosas iniciativas pedagógicas, como las ‘Escuela de Selva’ y la financiación de proyectos ambientales escolares.

En el ámbito productivo, REM I ha permitido fortalecer cadenas productivas de maderables y no maderables del bosque como asaí, caucho, cacao, canangucha, así como ha orientado y fortalecido la capacidad instalada de diferentes proyectos de turismo de naturaleza.

Uno de los logros principales de REM I en estos siete años ha sido potenciar el Sistema de Monitoreo de Bosques y Carbono, transformándolo en una herramienta poderosa que no solo detecta la deforestación en tiempo real, sino que también revela el cuándo, el cuánto y el dónde con precisión.

Destaca también la consolidación de tres Núcleos de Desarrollo Forestal y la Biodiversidad (NDFyB), los cuales tienen como objetivo transformar social, económica y ambientalmente zonas específicas a partir de acuerdos sociales y de conservación; el ordenamiento ambiental del territorio, el fortalecimiento institucional y la generación de una agenda ambiental para la paz.

Estos tres núcleos son: NDFyB Los Puertos, en Calamar, departamento del Guaviare, compuesto por 23 familias en 6.291 hectáreas; NDFyB Orotuyo, en Solano, Caquetá, compuesto por 33 familias en 10.000 hectáreas, y el NDFyB Nueva Ilusión, en Cartagena del Chairá, Caquetá, conformado por 144 familias en 30.000 hectáreas.

En siete años de aprendizajes y sueños cumplidos, REM I ha sido un catalizador fundamental para transformar las realidades de las familias indígenas en sus territorios. A través de su apoyo decidido, tanto en recursos como en acompañamiento, las comunidades han podido implementar iniciativas arraigadas en su ancestralidad, con el respaldo de Visión Amazonía en equipos, financiamiento y fortalecimiento institucional.

REM II, el compromiso continúa

La culminación de REM I marca el principio de una nueva fase: REM II. El horizonte será seguir reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero de la deforestación en Colombia y utilizar de manera sostenible los bosques naturales con los pueblos que los habitan.

Dentro de sus objetivos, REM II consolidará los Núcleos de Desarrollo Forestal (NDFyB) en el marco de una estrategia integral de intervención en el territorio, aportando a la reducción de la deforestación; asimismo, REM II dirigirá esfuerzos para fortalecer a las comunidades indígenas en su gobernanza ambiental del territorio y las entidades territoriales y autoridades ambientales nacionales y regionales en gestión y gobernanza forestal y en el control de la deforestación. Para ello, REM II contará con un presupuesto de $33,4 millones de euros ($160.000 millones de pesos colombianos).

Info Vision Amazonia

LETICIA AMAZONAS – BOGOTA – PEREIRA – MANIZALES– VILLA MARIA

Andes Occidentales Colombianos

Villamaría (Colombia), Punto de partida, LETICIA AMAZONAS, aeropuerto Alfredo Vásquez Cobo, seguido, aeropuerto de Bogotá, (Dorado), con escala en Matecaña, (aeropuerto) junto con periodistas, Procolombia y Kasa Agencia empieza la travesía, conocer una de las seis regiones turísticas más visitadas del país, con la estrategia ‘ COLOMBIA, EL PAIS DE LA BELLEZA ’, nos adentramos atravesando Pereira, pasando por Manizales, hasta llegar al municipio de Villa María buscando la ruta del Cóndor, camino hacia el nevado de Santa Isabel, en el corazón de las montañas colombianas, después de 17 kilómetros, a  1 hora llegamos a la estación, un sistema de transporte aéreo, una cabina suspendida por unos cables moviéndose de extremo a extremos a una altura de 200 metros, al lado  David Montilla, persona que nos acompañó durante todo el recorrido en busca de ver la pareja  de cóndor, que fueron reintroducidos en 1998.

Al día siguiente se realizaron varias caminatas, en especial la del nido de Calima y Picana , la pareja de cóndores que viven en los Andes Occidentales colombianos, en el departamento de Caldas, a 2.260 metros de altura, estos cóndores fueron criados en Cali Ella y El en California,  estos fueron puestos en libertad juntos en la naturaleza andina cuando eran unos polluelos; ahora su especie corre peligro.  

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Después de una larga travesía de 4 días y 3 noches conociendo uno de los lugares más montañosos, ricos en biodiversidad, con café,  Procolombia, Kasa Agencia y Periodistas, retornamos a las ciudades de procedencia.